Te gesté entre sueños,
sabiendo que era mi destino ser tu madre.
 
Abrace tu cuerpo entre mis sueños,
y me aferre a la idea de hacerte real.
 
Mi niño, de 5 semanas, de cabellos de fuego y ojos de mar,
así te creó el universo para mí y así te aguarde.

Una mujer de pelo oscuro, su hija y una bruja, alejaron a tu padre
y con su partida se llevaron también tu vida.
 
Te gesté entre sueños, durante 5 semanas, te pienso a mi lado,
oigo tu risa y me imagino tus ojos.
 
Veo tus manitas unirse a las mías,
siento tus besos y tus caricias en cada sueño.
 
La maldad de esas 3 mujeres te alejaron de mí,
destrozaron mi mundo y sin piedad alguna se convirtieron en tu verdugo…
 


María Victoria Campos Pérez.