Hace unos años participé con el tema de cómo hacer presentaciones de impacto para una empresa en la industria de la construcción. Recuerdo perfecto que algunos participantes me decían que cómo iban a caminar en el escenario si normalmente, el estilo para presentar dentro de la organización era estar parado detrás de un podio y leyendo los discursos, así lo veían en los altos mandos y así creían que debían hacerlo.
Esta semana hablando del mismo tema con uno de mis clientes en programa individual, hablamos sobre cómo introducir las palabras increíble, impresionante, asombroso dentro de su discurso. Al principio me dijo que no eran palabras que usara comúnmente cuando hablaba y que no se sentía cómodo usándolas en sus presentaciones. Una vez que le expliqué cómo podía lograrlo y al mismo tiempo verse natural empezó a aceptar la idea de utilizar estas palabras en sus presentaciones.
Hoy vengo de una reunión, dónde un director de ventas me pidió participar con el seminario de “Presentaciones de Impacto” para su equipo, hizo la observación de que esperaba que cambiaran el chip de cómo habían presentado siempre y que lograran ser diferentes, inclusive que tuvieran un propio estilo y no necesariamente aplicarán la forma en cómo lo hace él.
En los tres casos, la intención es provocar que la gente para lograr sobresalir sea
DIFERENTE. Si hacemos lo que todo mundo hace, lo que se estila, lo que se espera, lo que hace el de arriba o el de enfrente, vamos a ser parte de un todo que no se distingue. Esto no quiere decir que otros lo hagan mal, sino que se trata de romper el molde y ser auténtico. Si procuramos explotar nuestros talentos, si te atreves a aplicar otras ténicas, siempre y cuando te sientas cómodo, entonces es cuando vas a sobresalir y te vas a distinguir.
Las personas, entre tanta información y situaciones similares, no sabe con quien voltear y tener lealtad. Por el contrario, cuando te atreves a experimentar usando técnicas que te distinguen, cuando no te importa que toda la vida lo has hecho de alguna forma o que en tu organización hay un cierto estilo, es cuando te vas a dar cuenta qué puedes sobresalir.
Esto no quiere decir romper reglas o políticas dentro de la compañía, esto no quiere decir que intentes hacer algo de lo que no te sientes cómodo. Cuando no eres sincero y transparente, cuando se ve forzado, la gente lo nota y pierdes credibilidad y confianza. Pero si poco a poco practicas y vas aplicando técnicas en tus presentaciones, en tu forma de comunicar, vas a ir notando que te vas a distinguir. Además de posicionarte con fuerza, serás ejemplo a seguir para quien te rodea. Esto es lo que resalta tus atributos y talentos.
Foto: Dreamstime
Comentario
Querida Ale:
Muchas gracias por las recomendaciones, me parece que es necesario cambiar la dinámica en la que hacemos presentaciones y hacerlas más cercanas al público.
Y creo que también es más fácil evitar el miedo al público cuando se camina por todo el auditorio y hasta se hace mucho más ameno y para el público o al menos en mi caso es más fácil poner atención.
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