Por Mujeres Construyendo – julio 2025
¿Cuántas veces al día el mundo nos invita a callarnos, desaparecer, aguantar en silencio?
No con gritos, sino con gestos sutiles: con la exigencia de productividad, con la sobrecarga de los cuidados, con la violencia que se normaliza, con la falta de tiempo, con la invisibilidad en las conversaciones públicas o con la digitalización acelerada que nos excluye si no tenemos los recursos o la energía para estar “al día”.
Y sin embargo, seguimos aquí.
Porque volver a nosotras no es un acto individual: es un gesto político, una forma de resistencia que empieza por el cuerpo, la palabra y la memoria.
En un mundo atravesado por la inmediatez, el agotamiento y la saturación, muchas mujeres sentimos el deseo de regresar a lo esencial: a lo que somos, a lo que habíamos dejado en pausa, a lo que duele y también a lo que nos sostiene.
Este mes en Mujeres Construyendo abrimos espacio para ese regreso. No un regreso nostálgico, sino un retorno profundo, ético y necesario.
Hoy más que nunca, cuando los retrocesos en derechos se disfrazan de reformas, cuando se nos borra de las conversaciones públicas y los algoritmos silencian nuestras voces, volver a nosotras es recuperar el derecho a existir, a hablar, a pensar con libertad.
Volver a escribir aunque nadie lo lea todavía.
Abrir la cámara y decir lo que pensamos.
Levantar la mano aunque tiemble.
La visibilidad no es un lujo.
Es la afirmación de que nuestras vidas importan.
Que nuestras historias construyen el presente.
La tecnología puede agobiarnos. A veces parece diseñada para otros tiempos, otras voces, otros cuerpos. Pero también puede ser una herramienta de cuidado, creación y comunidad si la usamos con intención:
Desde sus inicios, Mujeres Construyendo ha creído que la tecnología es política. Y cuando está en nuestras manos, puede ayudarnos a volver, a escucharnos, a no rendirnos.
En las últimas semanas, hemos leído entradas de blog que hablan de cansancio, de pausas largas, de escribir después de años. Vimos imágenes compartidas con la frase “aquí estoy”, palabras que parecen susurradas y a la vez necesarias.
Todo eso también es “hacer ruido del bueno”.
Es reconstruirnos en voz baja, pero firmemente.
Es demostrar que la comunidad está viva, aunque a veces nos sintamos lejos o en silencio.
Cada línea escrita, cada audio grabado, cada foto compartida, es parte del tejido narrativo de Mujeres Construyendo. Y nos recuerda que no volvemos solas.
En tiempos donde se nos empuja a los márgenes, ya sea en decisiones políticas, debates públicos o plataformas digitales, volver a nosotras es también una forma de reclamar nuestro lugar en la conversación democrática.
La democracia no se construye sólo en las urnas. Se construye cada vez que una mujer decide hablar, compartir, disentir, escribir.
Y si las voces de las mujeres están ausentes, lo que llamamos democracia está incompleto.
Habitar nuestra palabra, visibilizar nuestras historias, y participar desde donde estamos es ejercer poder ciudadano.
Tal vez es tu voz.
Tal vez es tu energía.
Tal vez es tu fe.
O esa parte de ti que habías escondido porque pensabas que ya no tenía lugar.
Este mes de julio, te invitamos a sumarte al tema "Cuando el mundo nos quiere en silencio, volvemos haciendo ruido del bueno".
#VolverANosotrasMC #TuVozCuenta
Aquí, entre mujeres, volver no es rendirse. Es empezar otra vez con fuerza renovada.
Bienvenida. Este es tu lugar para volver también.
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