Hace un par de años, platicando con la directora de una empresa de comunicación y medios, recordaba asombrada, el caso notorio cuando entrevistó por primera vez a su asistente que llegó vestida muy formal y ejecutiva. Cuál fue su sorpresa cuando su asistente en menos de un mes, empezó a copiar el estilo de vestir de los ejecutivos que tenía alrededor que era demasiado relajado. Uno de los factores que más influyó en contratarla fue que le puso cuidado a su apariencia, y de pronto, empezó a cambiar al grado que había una inconsistencia entre su capacidad y  lo que se percibía que podía lograr. Su imagen poco a poco se empezó a debilitar.

Y no sólo lo que afecta profesionalmente a la asistente, esto influye directamente en lo que se espera y se percibe del jefe y de la organización. Les pongo un ejemplo, si entras a un mercadito en medio del centro, sin mucho orden, con todos los productos en rejas de madera y la gente vestida con un mandil en ropa casual, no esperarías encontrar un producto de alta calidad y de alto costo. Esto pasa igual cuando una asistente no cuida estos detalles la primera vez que alguien la ve, al entrar, esa persona puede asumir lo que puede esperar de una reunión con su jefe.

Una asistente ejecutiva, tiene que estar a la altura del puesto de su jefe.  Debe cuidar los detalles al peinarse, maquillarse, vestirse y sobre todo en la forma en como se comunica con otros.  Es un mensaje de lo que es importante como valores profesionales y de la misma organización.

Si tu cargo es asistir a un ejecutivo de alto nivel no olvides considerar lo siguiente:

• Tú arreglo personal. Desde la ropa que usas hasta si te tienes que levantar más temprano para verte bien, entonces hazlo, no asumas que tendrás tiempo durante las horas de trabajo. Todos sabemos lo absorbente que puede ser esta labor y que en ocasiones no haya espacios libres para hacerlo. Si no usas uniforme, asegúrate que tu ropa mande mensajes profesionales y la seriedad que se requiere como representante de la marca de tu jefe.

• La forma en como te comunicas con otros dentro de la organización y fuera de esta.  Si decides tratar mal a otros por que tu jefe tiene el poder, piensa que otros van a asumir que tu jefe es igual y que es alguien que no es accesible.  Los clientes o proveedores, tendrán la misma imagen y si tu no cuidas las formas,  corres el riesgo de mandar señales equivocadas. Si tu jefe lo mueven de puesto o se va de la compañía, cuando te tengan que reasignar, a lo mejor tus malas formas pueden influir en que no lo hagan o te manden a un área que no sea tan importante.

• Tu manera de tomar llamadas. Aún cuando tengas que filtrarlas antes de pasarlas a tu jefe, cuida que tus formas sean las correctas, no dejes de ser amable, educada y cortés, eso no quita que seas firme.  Se de muchas ocasiones en que han omitido pasar llamadas importantes tan solo por que deciden poner obstáculos a quien habla y asumen que es lo correcto. 

• Contestar  correos electrónicos . No importa la respuesta que sea,  siempre quedarás mejor si contestas con la verdad;  habla de bien de los valores y liderazgo no solo tuyo sino de tu jefe y lo que es importante para él. Cuando tengas que decir que no, hazlo, se cortés y hazle saber al otro por que es que no puede avanzar el tema.  Evita ignorar el mensaje y no darle importancia.  He impartido cursos en varias ocasiones a grupos de asistentes ejecutivas, todas han reconocido que siempre han estado del otro lado, pidiendo llamadas o respuestas a temas que sus jefes están buscando y frustrante que es cuando  deciden ignorar sus comunicados. 

Mi intención es recordar a esas maravillosas personas que asisten a profesionales, a que se esmeren en su presencia ejecutiva y su trato con otros, habla directamente de sus talentos y valores y de los de su jefe inmediato. ¿Cómo pretendes que otros te perciban a ti como extensión de una marca personal?

Foto: ID 49419623 © Vladans | Dreamstime.com

Ale Marroquín es fundadora y directora de Imagen y Protocolo de Negocios especialista en personal branding. Se dedica a reinventar y posicionar la marca personal de profesionales, ejecutivos de alto nivel, emprendedores que quieren acelerar su potencial a través de su presencia ejecutiva. Ella está certificada por la Asociación Internacional de Consultores en Imagen como CIP (Certified Image Professional).

Acelerando el potencial de las personas.