Hace muchos, muchos años que no te escribo, sabes? recién te fuiste te escribía a diario, pero después deje de hacerlo porque tenía que aceptar que te habías ido , hoy recordé que nunca más te escribí después de esos terribles días de dolor por tu partida. Ese dolor que desborono mi corazón, saco el alma de mi cuerpo y me dejo destruida por algún tiempo, hasta que comprendí la existencia de Dios y sus designios, porque para que mentirte aún estoy muy lejos de aceptar todo lo que me pasa, aun cuando sé que todo tiene un motivo, un para qué?, pero te confieso lo sigo intentando cada día.
Quiero que sepas, que no es que no te extrañe, te aseguro que hay días que te extraño más de lo normal, que ha habido días que he gritado tu nombre hasta cansarme, hay otros que no he podido contener mis lágrimas porque ese nudo que se hace en mi garganta me ahoga y las lágrimas es el único remedio para no asfixiarme.
Sabes hoy vinieron a mi memoria muchos recuerdos de nuestra niñez, de nuestra juventud, recordé ese camión de madera que te trajeron los reyes en el que me subía y tu jalabas con esfuerzo, eras tan pequeño y tan flaquito, o cuando tuvieron que detener la rueda de la fortuna por tus espantosos gritos, estaba tan enojada contigo, por tu culpa nos bajaron, recuerdas cuando nos metíamos debajo de la cama y fingíamos estar viendo la tv. En un caja de zapatos inventando nuestras propias historias? Que me dices de cuando nos hacíamos tacos de limón jajajaja los guardábamos y en las noches cuando nuestros padres dormían, los comíamos como si fueran un manjar, jugamos a la comidita, a la escuelita, como recuerdo que siempre seguías mis loqueras, recuerdas las muñequitas de papel? Te hacia que las vistieras y jugaras conmigo, jugamos a las canicas, la rayuela, el stop, los encantados, las cebollitas, ahhh mi querido hermano fuiste el mejor compañero de juegos de mi niñez y mi cómplice en mi juventud, fui tu madre en la primaria, tu amiga en la secundaria, tu hermana mayor en la juventud, fuimos tan unidos, fuimos confidentes, amigos, y en ocasiones enemigos, porque aun cuando nos llevábamos tan bien, hubo grandes peleas, golpes, rasguños, palabras, ofensas , apodos.
Pero cuanto nos queremos hermano, aun en la distancia siento tu protección , si porque ahora es al revés, ahora eres tú el que me cuida, aun cuando no te veo , me siento resguardada, hay momentos que siento tu presencia, te he visto muy pocas veces en sueños y he reído por tus travesuras.
Mi querido hermano, sé que en algún momento tú serás el que me guíe a mi destino final, te voy a esperar, porque sé que ese día nos abrazaremos y juntos recordaremos todos los buenos momentos que pasamos, tu guiaras mis pasos a ese nuevo hogar en el que hoy estas.
Hermano, mi adorado hermano, para mí no has muerto, solo estás en un mejor lugar, solo regresaste a tu hogar en el que un día nos volveremos a encontrar.
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