Muchas veces nos olvidamos de cuidar las puertas y ventanas, sin recordar que gracias a ellas podemos disfrutar de nuestra casa.

Todas las aberturas de la casa significan el ingreso o salida del interior al exterior y viceversa. Ya sea por el material, la función o el lugar en donde se encuentren, ellas necesitan de un mantenimiento general así como todas las partes de nuestro hogar.

Si tenemos puertas y ventanas de madera, es importante realizar una revisión general de pintura y productos de protección cada dos años. Pero, en la diaria podemos ejercer cuidados mínimos como ventilar los ambientes para evitar que concentren humedad y se hinchen, limpiarlas con una gamuza suave y apenas humedecida dos veces por semana. Es importante evitar cualquier tipo de producto abrasivo porque puede dañar la madera.

Las aberturas de aluminio son una excelente, económica y estética opción para estos tiempos. Su mantenimiento es práctico y sólo requiere de algunas pautas mínimas y mensuales. Utilizar paños con agua y detergente (ningún líquido abrasivo) con un chorro de vinagre es una excelente mezcla para que puertas y ventanas luzcan brillantes. Para mantener los rieles libres de impurezas, así como los ángulos y rincones, se debe aspirar con una boca finita para lograr una limpieza profunda y completa.

En el caso de las puertas, sea cual sea el material, es importante no olvidar revisar las cerraduras. Aunque no nos parezca, ellas también necesita un mantenimiento continuo, ya sea con un especialista de alguna cerrajería en Córdoba  o buscando información en algunos portales de cuidado del hogar.

Por último, el clima del lugar donde vivimos en un factor muy importante para tener en cuenta en el mantenimiento de las aberturas, ya que los materiales no reaccionan de la misma manera frente a las variaciones climáticas.