Muchos cambios me ha tocado vivir a lo largo de mi vida. Son muchos los temas en los que puedo basar esta afirmación.

    El primer tema , el que nos esta manteniendo mojados, húmedos, friolentos y en el mismo día también sofocados (por las ropas abrigadoras), es el tema climático. Ahora vamos sumando nombres de huracanes, a lo largo del abecedario, con días  nublados, grises, airosos, esperando en cualquier momento la lluvia, que ya casi siempre es torrencial, a veces con granizo y también a veces es granizo sin agua.

     Días que amanecen opacos, tristes y casi en un abrir y cerrar de ojos y sin imaginarlo, las nubes se tornan blancas  abriéndole camino al sol radiante y al cielo azul hermoso, para volvernos a asombrar, en un par de horas, con una cerrazón obscura que nos trae una tormenta.

     Antes y en épocas muy determinadas, nos llegaban los nortes desde Veracruz. Eran días ligeramente nublados, lluvias suaves y cortas y no necesitábamos mas que un sweater para sobrellevar esos terribles días.

     Se me acaba de venir a la memoria el recuerdo de cuando me tocó ver nevar, aquí en el D.F. Era una chiquilla, tal vez de ocho ó nueve ó diez años. (Sé que con esta asombrosa tecnología se pueden encontrar muchos datos, buscaré en que año sucedió esta nevada y se los haré saber).

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     Esto que están ustedes leyendo, lo escribí uno ó dos días antes de que entraran a nuestro país Ingrid y Manuel, que tan terribles daños han causado!, tantas vidas perdidas!, tantas personas desaparecidas!, tanta necesidad han creado!. Sumo mi voz a muchas otras, para pedir cooperación y ayuda para quienes tanto la necesitan.