Ahhh que rico es comer cuando el cuerpo necesita hacerlo!, un jugo de naranja y un yogurth con fruta, una rica sopa de verduras o un caldo de pollo, una ensalada verde, o un caldo tlalpeño, o que tal un arroz a la mexicana o unas enchiladas verdes, o tal vez un bistec a la parrilla y unas empanadas con chimichurri, o imagínate unas jícamas con chile y limón y una jarra fresca de agua de tamarindo o jamaica, riquísimo!!!

Y es que todo el contexto del comer es un disfrute!, desde el lugar que elegimos, hasta los colores que adornan los manteles de la mesa y la vajilla. Incluso si se trata de un lugar de comida rápida o un puesto de comida para llevar; son los colores, los sabores, los aromas, las texturas, y los sonidos, los elementos que enamoran a nuestros sentidos y nos inspiran en crear las experiencias del buen comer.

Ahora, imagina un día como muchos, justo en el momento en que ya sientes una profunda necesidad de alimentar tu ser, has esperado varias horas para poder liberarte de las diligencias del día y finalmente es tiempo…a comer!!!!, a comer!!!, a comer!!!

De forma intuitiva llegas al lugar, y justo cuando estás decidiendo lo que pedirás te entregan un juego que contiene un plato, un vaso y unos utensilios para comer, solo que alguien se habrá confundido porque ¡¡¡todo te lo entregan sucio, con los residuos de comida del último día que estuviste ahí!!!

Y, ¿tú comerías con todos esos utensilios sucios llenos de restos de comida seca y dura del día anterior?, si por algún momento coincides conmigo, creo que la respuesta es...Noooooooooooooo!!!!

¡¡¡Merecemos comer en trastes limpios!!!

Si para bien comer es necesario hacerlo en trastes limpios, ¿Por qué se nos olvida limpiar y liberar el corazón antes de iniciar una nueva relación?, ¿Por qué se nos olvida soltar las cosas que ya endurecieron a nuestros ser y que solo lo llenan de costras?, ¿Por qué a se nos olvida sacar de nuestro armario cosas que nos atan con el pasado y que ya perdieron su significado?, ¿Por qué se nos olvida recapitular los ciclos de la vida solo para aprender de ellos cuando iniciamos nuevos retos y nuevas historias?, ¿Por qué se nos olvida limpiar a la memoria corporal y emocional de todo aquello que nos limita crecer y evolucionar?, ¿Por qué se nos olvida liberarnos de todas esas telarañas mentales y simplemente recibir con espontaneidad lo que la vida tiene para regalarnos?, ¿Por qué insistimos hacer las mismas cosas si nos siguen dando los mismos resultados que ya no nos gustan?, ¿Por qué insistimos en echarle limón a las heridas en lugar de sanarlas?, ¿Por qué se nos olvida perdonarnos y perdonar?

Es momento de darnos cuenta que cada día es un nuevo comienzo, que cada relación es una nueva historia, que cada decisión tiene su propio camino, que todas las experiencia de vida son únicas aunque las vivamos con la misma persona. Que la impecabilidad de vivir es andar ligeros para movernos hacia cualquier experiencia que se nos ocurra imaginar, ¡¡¡cualquiera que nos posibilite el amar, y que nos facilite el disfrutar de todas esas cosas que igualamos con la felicidad!!!

Darnos cuenta que para nutrir a nuestro ser necesitamos liberarnos de corazón de todas nuestras resacas mentales y emocionales, y dejar listo un espacio impecable desde donde sea posible recibir, ¡¡¡nos lo merecemos, y también lo merece cada relación que construimos!!!

Y tú, ¿estás list@ para limpiar y liberar a tu corazón?...