¿Cómo pueden estar relacionados entre sí un perro, un zapato y la vida humana?... Pues para la Ley de Protección Animal en el Distrito Federal un perro tiene el mismo interés jurídico que un objeto y su vida no puede ser prioridad si está en peligro dentro de una propiedad de su humano considerado "propietario". Y los derechos humanos se mencionan aquí porque no podemos determinar qué derecho es más importante para todo/as... si uno se violenta, se violentan todos. Todos los derechos son importantes y aunque no lo notemos están interrelacionados: el derecho a un medio ambiente sano, el derecho a la dignidad como personas y el trato que le damos al planeta. Una acción pequeña puede generar grandes cambios, yo le apuesto a eso: no a las acciones mediáticas, a acciones que parecería necesitan de una silla presidencial o de salir en la foto enorme de un diario.

Les cuento... Un lunes hace tres semanas, pasó por el café en donde estaba una amiga y preguntó si podían subir una foto y denunciar que un perrito llevaba ya algunas horas dentro de la cabina de una camioneta estacionada en una esquina.  Anochecía y tratamos de darle agua al pobre animal que nervioso, ladraba a cuanta persona se acercara. Con un popote le pasamos el agua y el animalito lamía el vidrio tratando de tomar todo lo que pudiera.  Tampoco tenía alimento.  

Al día siguiente regresé en la mañana para ver si habían pasado ya por él… el perrito ya no ladraba y permanecía acostado… ¡Había pasado toda la noche y tarde ahí! En ese pequeño espacio y además amarrado con un cable. La camioneta era una camioneta vieja y destartalada que estaba junto con los implementos de un tianguista apartando lugar en la calle para el tianguis del viernes (era lunes cuando lo dejo)

Subí la foto desde la noche anterior pero no se veía muy bien. La segunda foto logró capturar la mirada del perrito. Se reprodujo la foto y le dieron muchísimos RTs por tuiter… hubo quienes por teléfono llamaron a la Brigada Animal y dos jóvenes, una chica y un chico se presentaron al lugar de inmediato (le siguieron una asesora de un senador y un friego de vecino/as indignado/as).  La presión de las redes sociales hizo que se volviera tendencia en la Cd de México el tema del perrito… llegaron entonces patrullas, un veterinario y la camioneta de la brigada especial de rescate animal. Le siguieron personal de la delegación, la Procuraduría Ambiental y hasta los bomberos… para entonces ya estaban alrededor de 20 personas y vecino/as que pasaban y se quejaban porque era común ver al animal amarrado y el lío que se hace con el tianguis, de la basura en una esquina y demás quejas que no son atendidas (y sospecho que tampoco denunciadas formalmente en una ciudad donde ir a levantar una queja puede llevarte días…)

Se volvió un mitote pero... el perrito seguía encerrado, porque la camioneta, sin el dueño presente, se considera propiedad privada… y el perrito también… tiene el mismo estatus para la ley que un zapato, que una bolsa de piel… aunque el perrito sufra y tenga sed y hambre y esté atrapado:  el perro como el zapato no puede ser rescatado de la camioneta. ¡¿Absurdo?! Sí pero la Ley en contra del maltrato a animales tan flamante tan bonita para la foto  no contempla que un ser vivo no puede ser equiparado a un objeto inanimado. Se necesita cambiar la ley y que contemple un apartado que sea prioritario salvar al animal si un dueño es tan tarado como para dejarlo en una situación de sufrimiento y peligro.

Así que teníamos a los bomberos, a personal de la delegación, a la procuraduría ambiental, a los policías, a la brigada animal y a activistas dispuestos a ir a la cárcel por abrir una camioneta desvencijada para salvar al perrito... y no podíamos abrir la camioneta, sacar al pobre perro sin ser acusados de robo y daño en propiedad privada...pffff

Decían en las redes y ahí en la calle que porque no habían abierto la camioneta, que las autoridades presentes se hicieran de la vista gorda… las autoridades trataban de “fundamentar” una acción legal para poder rescatar al perrito sin violentar la Ley.  Y es que no podemos brincarnos la ley, aunque tengamos razones válidas y aunque modificar una ley lleve años.  Las autoridades no pueden hacer nada que no esté previsto en la Ley…  y nosotros/as como ciudadanos/as podemos hacer lo que queramos mientras no lo prohíba la Ley (y abrir propiedad ajena está prohibido) suena sencillo y difícil cuando diariamente vemos que media ciudad y medio gobierno hace lo que se les pega la gana… pero es que si queremos ser respetados y tener medianamente una certeza de seguridad no es con más policías o con más armas… es con la certeza de que la ley se aplica y que sean leyes justas… De ahí que hasta en salvar un pobre perrito tengamos que saber de cómo funciona la ley y de las obligaciones de legisladore/as, autoridades y ciudadano/as, conocer nuestros derechos humanos.

Necesitamos una ley de verdadera protección a animales en esta ciudad. Me sorprendí muchísimo de cómo el tema de rescatar a un perro puede mover la solidaridad y el buen corazón de tantas personas. Una defensora de derechos humanos se lamentaba de que hubiera más réplica e indignación un perro que una mujer asesinada. Yo también estoy sorprendida pero no lamento que así fuera… creo que si las personas pueden conmoverse aún por el sufrimiento de un animal se puede seguir trabajando e informando para que se interesen , se conmuevan y se indignen por otros temas… No es cuestión de jerarquizar las vidas.  Necesitamos informarnos (irónicamente ahora que hay más información) educarnos más y trascender el primer impulso y ser un poco más terco/as y hasta ingenuos en tratar de seguir cambiando este mundo.

Ahora el perrito está afortunadamente en un hogar después de que su dueño , por miedo no se presentó a demostrar la propiedad del animalito. Me quedo con tres tareas que espero hagan suya si es posible y apoyen a rescatadora/es, organizaciones civiles y refugios que están luchando por una vida digna para las mascotas.

1.- No regalen seres vivos pensando en que serán tratados bien. Tener una vida no humana en nuestras manos requiere un compromiso de al menos 15 años y la obligación de cuidarle y tenerle en perfectas condiciones su espacio y alimento. Cuando adoptas lo/as rescatadores te acompañan en reflexionar con cuestionarios y platicando si estás preparado/a para tener una mascota.

2.- Necesitamos apoyar y presionar a legisladore/as a cambiar la ley que equipara a un ser vivo con un zapato por la arrogancia de creer que la única vida que importa es la humana. A lo mejor si se cambia esa concepción podríamos empezar por los árboles (en peligro constante en una ciudad que se asfixia a sí misma) y por sus animales (con un control sano y humano de mascotas y respetando y cuidadno a las poblaciones de gatos ferales que también ayudan a controlar fauna nociva como ratas) y de ahí a defender y no tolerar mayor impunidad para 100 mil muertos, feminicidios, periodistas asesinados por hacer su trabajo, migrantes en busca de una vida mejor…

3.- Seguir trabajando por una cultura de derechos humanos integral que contemple que todos los activismos y todos los temas están interrelacionados entre sí… porque la solidaridad y el respeto a la vida comienza por una vida digna que respeta, conoce la ley, cambia las leyes injustas y promueve el respeto y la tolerancia.