Es común escuchar que las niñas y los niños de hoy son “nativos digitales”, no sólo porque nacieron en la década de los 90 y a principios del siglo XXI, sino porque se identifica a una generación que ha hecho suyas las tecnologías.
En la actualidad, pequeñas y pequeños crecen en un mundo dual: el físico y el digital, en donde experimentan dos realidades: la del contacto presencial y la de la interacción virtual, lo que duplica los retos a sortear en ambos espacios, de tal manera que logren encontrar equilibrio para su beneficio.
Aquellos infantes que pueden estar conectados tienen mayores oportunidades de aprendizaje y de hacerse escuchar, si usan de forma responsable y segura las redes sociales y las aplicaciones electrónicas a su disposición.
Al respecto, la UNICEF, en un informe de 2017 sobre el estado mundial de las niñas y niños en el entorno digital, señala que los avances tecnológicos pueden ampliar el alcance de su educación y mejorar su calidad.
Para Maria Luisa Fornara, representante de dicha agencia, internet no fue pensado para la infancia, a pesar de que, paradójicamente, en esta etapa están sus principales usuarios.
Para que las personas nativas digitales, en particular para las que son menores de edad, gocen de las ventajas que brindan las tecnologías, deben saber manejarlas, comprender cómo proteger su identidad virtual y sus datos personales, conocer sus riesgos, y ser conscientes de la información que comparten.
Los peligros tradicionales a los que ellas y ellos se enfrentan, como el abuso, acoso o explotación infantil, se han amplificado en línea, a través del ciberbullying, grooming o sexting.
La iniciativa de la UNICEF Ciudades Amigas de la Infancia ha destacado que antes de que las personas cumplan 13 años ya se han recabado 72 millones de sus datos. También ha señalado que 61 por ciento de quienes tienen de ocho a 12 años han sido contactados por desconocidos mientras jugaban online, y 58 por ciento ha sufrido acoso en la red.
Asimismo, ha resaltado las consecuencias a la salud que ha traído consigo el uso excesivo de teléfonos móviles, como la ansiedad, la falta de sueño o las dificultades para concentrarse.
María Montessori, creadora del modelo educativo que lleva su apellido, sostenía que “sembrar en los niños (y niñas) ideas buenas, aunque no las entiendan; los años se encargarán de descifrarlas y de hacerlas florecer en su corazón”.
En este 30 de abril, día de nuestras pequeñas y pequeños, hagamos eco de sus palabras estando cerca; acompañándolos en su desarrollo; fomentando la confianza, afecto y diálogo, e inculcándoles pensamientos valiosos, éticos y responsables, para que la dualidad del mundo en que viven, físico y digital, potencie su crecimiento.
Fuente:
"Pequeñ@s que crecen en un mundo dual: físico y digital", columna invitada, El Heraldo de México, 26 de abril de 2022, disponible en: https://heraldodemexico.com.mx/opinion/2022/4/26/pequens-que-crecen...
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