ESto va de mal en peor. No me quiero hacer víctima, no lo soy,pero simplemente no sé cómo salir de este agujero al que me he metido. Detesto levantarme, odio amanecer y tener que arrastrarme por el día haciendo las cosas que tengo que hacer. La última vez que me sentí devastada fue hace muchos, muchos años. Hoy estoy así nuevamente y me siento fatal. No me gusta. Me odio así. Me dice mi terapeuta que no me victimice, que coma chocolates y que no esté sola. CArajo. No puedo ni quiero estar con nadie. Si no me soporto yo sola, cómo puede alguien más hacerlo. Hice un ejercicio del libro de Susan Forward y fue muy fuerte. LE escribí una carta a mi padre diciéndole cómo me había sentido por su abandono y acabé escribiéndola a él y a mi madre y diciénodles que los odiaba a los dos por haberme abandonado desde niña, por haberme dejado sola y por haberme hecho sentir tan vulnerable. A el por beber como lo hacía y por haber estado borracho la única vez en mi vida que le hablé para pedirle algo. A ella la odié por haberme enseñado que el amor se sufre y que los hombres son una mierda, que no puedes confiar en ninguno pues al final te van a abandonar y que las mujeres "buenas" al final nos quedamos solas. Los odié. Si eso fue lo que sentí de niña, que es lo que estoy sintiendo en este momento, no sé cómo sobreviví y no me morí. El dolor que traigo encima, que tal vez lo catalizó la relación que estoy terminando, es un dolor añejo y por ello lo siento tan profundo. Si ese dolor lo sentí de niña, no sé cómo sobreviví. Odio mi vida hoy, aquí, en este momento. Me odio a mi misma. Odio todo.