Si buscas un lugar en Sudamérica que tenga arena, mar cálido, juventud, fiestas, alojamientos y restaurantes de todo tipo y que además el sol esté presente casi los 365 días del año, ese lugar es Máncora.

En su avenida principal puedes encontrar varias tiendas de artesanías, boutiques de ropa y algunos locales de alquiler de tablas con accesorios de surf. Hay profesores particulares de tabla, servicios de taxi privado, agencias de buses y prácticamente todo lo que un turista pueda necesitar para sumarte a esta aventura tan variada que ofrece la ciudad, además de las famosas playas de Máncora.

Una de las principales características de Máncora es su amplia variedad de propuestas gastronómicas. Entre los platos más típicos se encuentran todos aquellos que provienen del mar: cebiches, atunes, langostinos, conchas negras, cangrejos; los cuales se fusionan con los sabores particulares de la cocina peruana y hacen de cada plato una delicia.

Cabe aclarar que también hay otras opciones para los que no consumen pescados. Uno de los platos es el cabrito, preparado de diversas formas dependiendo el restaurant. Otra de las opciones y, la más rápida al paso, son los locales con comidas como pollos a las brasas, parrilladas, pizzas, pastas entre otros.

Luego de un rico almuerzo ya estarán listos para elegir una de las tantas aventuras que tiene Máncora para ofrecer. Podemos hacer:

Surf, kitesurf y windsurf

Olas perfectas y vientos parejos son aquellas de las características claves que reúne el mar de Máncora. Allí la práctica de estos deportes es un paso obligado no sólo para quienes viven aquí sino también para los turistas aficionados.

Buceo y pesca

En la zona de Piura y Tumbes la mayoría de los buzos que gustan de la caza, van en busca del Mero o del Fortuno, grandes peces finos que suelen merodear la costa de Máncora, a no muchos metros de la orilla y en algunos bajos conocidos sólo por buzos locales.

Otro reconocido lugar de pesca y buceo es Punta sal donde también se encuentran algunos bajos frente a la playa conocida como Peña Redonda. Cabe aclarar que siempre es recomendable ir con un guía o buzo local para una mejor ubicación.

Playas de Máncora

Sus aguas son tibias y tiene un excelente sol, este balneario es considerado uno de los más importantes de la costa peruana. La playa principal, ubicada entre las quebradas Fernández (Máncora) y Cunulsa, es ancha y se caracteriza por presentar pequeñas pozas que dependen de las filtraciones del mar.

Otro atractivo conocido como “las playas de Máncora” es una pequeña bahía con hermosas playas cuyo mar cristalino cautiva a grupos de jóvenes, familias y surfers como mencionamos anteriormente.

Pero Máncora no sólo son paisajes únicos y tranquilidad, cuando cae el sol los turistas se preparan para disfrutar la noche. Noches largas e intensas caracterizan a la ciudad iluminada por una decena de bares y algunas discotecas abiertas especialmente todos los días para recibir a nuevos turistas.

Si quieren sólo tomar algún trago tranquilos con algo de música los bares más concurridos suelen ser “Iguana’s”, “Mamíferos” o “El sitio”. En cambio si quieren ir a bailar, luces, música fuerte, tragos la discoteca es “Runawasi”.

Otras opciones que podremos hacer a tan sólo algunos kilómetros de Máncora son:

Hervideros

En ella se encuentran varias piscinas artesanales de agua tibia donde los turistas deciden pasar un tiempo para relajarse, tomarse unos minutos para mejorar su piel (dadas sus propiedades) y sentir la sensación de estar renovado.

Parque Nacional Cerros de Amotape

A lo largo de sus 75100 hectáreas, en la Zona Reservada de Tumbes encontraremos en medio de diferentes climas y paisajes, una mezcla casi imponente de Bosque Seco y Bosque Tropical. Además de su gran abanico de flora y fauna también podremos encontrar especies únicas en riesgo de extinción, como lo son los monos aulladores. A estos los podemos escuchar y ver dentro de la majestuosa Reserva.

Algunos de los animales más atractivos que podremos observar aquí son el cóndor andino, el tigrillo, el venado rojo, el sajino, el oso hormiguero norteño, el oso de anteojos, el venado gris, la ardilla de nuca blanca y el loro cabeza roja, entre otros.

En cuanto a la flora más destacada encontramos una gran diversidad de árboles tales como: el algarrobo, el hualtaco, el charan, el sapote, el pasallo y el guayacán.