La idea básica de esta filosofía de “creer para ver” es muy sencilla:  el ser humano es como un imán que atrae a sí todo aquello en lo que concentra su atención.  Si piensa que el mundo es un sitio inhóspito y cruel, dónde hay que luchar muy duro para ganarse el pan, eso es lo que manifiesta en su vida; si, por el contrario, cree que es un lugar abundante, donde hay amor, dinero y felicidad para todos, eso precisamente es lo que manifiesta en su vida.
 
            El universo, explica Dyer, y todo lo que hay en él, incluso los seres humanos, es pura energía.  La energía negativa –no puedo, no hay, no tengo- atrae más de lo que es, lo mismo que la energía positiva:  sí puedo, sí hay, sí tengo.
 
            Es por esto, explican los proponentes de la Visualización Creativa, que la persona que vive quejándose de achaques y enfermedades, siempre padece de… achaques y enfermedades, y una que sufre de una enfermedad considerada incurable, recupera la salud, porque cree en la salud.  Esto se debe a que, consciente o inconscientemente, y aunque nunca haya escuchado hablar de la Visualización Creativa, en su interior esta persona todo el tiempo está visualizando un resultado favorable:  día a día y a pesar de la evidencia contraria que tiene ante sus ojos, ella se impregna de ideas positivas.  Entonces comienza a atraer hacia sí todo aquello que es similar y compatible con estas ideas.
 
 
NO ES CUESTION DE MAGIA, SINO DE ENFOQUE
            Un ejemplo de esto es el actor Bruce Willis, quien dice que su éxito en Hollywood no lo tomó por sorpresa, pues “desde que trabajaba preparando las bebidas en un bar, me sentía una estrella y me veía triunfando en el cine y la televisión.  El éxito no fue una sorpresa, fue una consecuencia lógica…”
 
            Willis admite que no sabía de qué manera o bajo qué circunstancias lograría su meta, pero, para él, el triunfo no era cuestión de cómo, sino de cuándo.
            “Es por eso que hasta en la Biblia nos aseguran que cuando desees algo, pídelo y actúa como si ya lo hubieras recibido”, afirma Dyer:  “La parte importante es actúa como si ya lo hubieras recibido…”
 
            Esto se debe a que el componente más importante de la Visualización Creativa es que la persona sienta ya la emoción que espera experimentar cuando 
obtenga eso que tanto desea. En otras palabras: Bruce Willis quería ser una estrella, se visualizaba una estrella, se sentía una estrella y actuaba como una estrella.
 
            “Tanto si le dices al universo ‘sí puedo’, como si le dices ‘no puedo’, la respuesta del universo es:  hágase tu voluntad”, explica Rhonda Byrne en su libro The Secret.
 
            Los proponentes de la Visualización Creativa la comparan con el acto de ordenar de un catálogo:  “Una vez que pones tu orden, sabes que eso que pediste está en tu camino y es tuyo, no dudas que lo vas a recibir”, dice Byrne.  Para ella y los que creen en esta teoría, existe una forma muy simple de comprobar si la Visualización Creativa funciona.  “Si haces un inventario de tu vida actual, y luego haces un análisis de cómo llegaste adonde estás hoy, verás que tu vida es el resultado de tus pensamientos hasta este momento. No ocurrió lo que deseabas, querías o soñabas, sino lo que creías en lo más profundo de tu ser”, explica en The Secret.
 
 
LOS SECRETOS DE LA TECNICA
            Si descubres que la actitud básica que opera en tu vida, aún a nivel inconsciente, es “no puedo” o la “felicidad no es para mí”, los expertos en Visualización Creativa aseguran que puedes cambiarla mediante estos ejercicios.  La clave radica en practicarlos consistentemente y con fe absoluta:
·                     Decide qué deseas manifestar en tu vida.  Sé muy específica.  Decir “quiero ser feliz”, “deseo verme bien” o “necesito más dinero” es muy general.  Pregúntate:  ¿qué, exactamente necesitas para ser feliz? ¿Cuánto peso deseas rebajar? ¿Cuánto dinero deseas tener en tu cuenta de banco? De nuevo:  sé clara y exacta.  La clave radica en ver claramente en tu mente lo que deseas atraer a ti.  Comienza con algo sencillo, hasta que desarrolles mejor la capacidad de visualizar.
·                     Cuando estés completamente relajada, imagina eso que deseas, exactamente como lo deseas.  Visualízate en tu peso ideal, sin preocupaciones económicas o manteniendo una excelente relación con tu pareja, como si todo se desarrollara en una enorme pantalla de cine.  Fíjate en los detalles:  la ropa que vistes, el color del cielo, etc.  Trata de hacer la escena lo más vivida y realista posible.
·                     Disfruta plenamente de lo que sientes al ver tus sueños convertidos en realidad.  Siente la felicidad de hallar el amor, la paz mental que da tener los problemas económicos resueltos, la satisfacción de verte en tu peso ideal.  Al abrir los ojos y reincorporarte a tu día, trata de llevar contigo este sentimiento.  Actúa como si lo que acabas de visualizar ya fuera realidad.
·                     Shakti Gawain, autora de Creativa Visualization:  Hoy to Make it a Part of Your Life, recomienda practicar 15 minutos en la noche antes de dormir.  “Entonces el cerebro está más receptivo a las ideas”, dice.
·                     Nunca afirmes o visualices lo que no deseas.  Decir:  “no quiero ser gorda”, solamente atrae a la mente imágenes de sobrepeso… y más gordura.  No olvides que en todo momento debes pedir algo… y el universo te dirá “hágase tu voluntad”.