La lección de hoy en mi experimento de prosperidad, me recordó que mientras no seamos maestr@s en el conocimiento de nosotros mism@s, somos aún diamantes en bruto. Un simple pedazo de carbón.
Me sorprendió más aún la parte de como esta verdad se conecta con la prosperidad, en el sentido que cuando hemos cultivado nuestra sabiduría interior, somos capaces de andar el camino del corazón.
Y el camino del corazón, que si bien es uno de los caminos más difíciles, al final es de los mejores recompensados.
Porque en el camino del corazón, nadie nos puede indicar por donde ir, la única voz confiable que nos lleva y nos guía es la nuestra. Y darle valía a la propia voz, y reconocimiento a la propia guía, es tener acceso a los diamantes de la prosperidad infinita.
@Roxana_Psico
#MiExperimentodeProsperidad
#DiamantaEnBruto
#31de90
Día Treinta y Uno
200715
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